Evaporado el entusiasmo por el título de la Serie A logrado la pasada temporada, el Milan, que el martes se enfrenta a la Lazio, pena en esta cuesta de enero, en la que perdió la Supercopa, fue eliminado de la Copa y ve al Nápoles alejarse en la liga.

“Claramente no estamos viviendo nuestro mejor momento”, reconoció el técnico Stefano Pioli tras el duro golpe que supuso perder la Supercopa ante el Inter (3-0), el miércoles en Arabia Saudita.

Hasta noviembre y el parón por el Mundial, el Milan había cubierto con entusiasmo sus carencias. Pero desde la reanudación en enero la fatiga física y mental se ha impuesto.

Tras una victoria ajustada ante la Salernitana (2-1), que la había situado a cinco puntos del Nápoles, todo ha ido a peor.

En el campeonato empató 2-2 ante la Roma un partido que ganaba 2-0 en el minuto 86, resultado que repitió ante el Lecce, en un duelo en el que decepcionó principalmente en la primera parte.

El internacional francés Theo Hernandez, infatigable habitualmente, fue cambiado al descanso. 

En la clasificación, el Milan sigue segundo, aunque a 12 puntos del Nápoles, antes de visitar el Estadio Olímpico este martes para enfrentarse a la Lazio, sexto a cuatro puntos.

Además, los Rossoneri fueron eliminados de la Copa de Italia en octavos ante un Torino que terminó con diez jugadores (1-0 tras prórroga). En resumen, cinco partidos en 2023 con una sola victoria y nueve goles encajados.