abril 1, 2024
La triatleta brasileña Luísa Baptista, quien se alzó con la victoria en los Juegos Panamericanos de Lima 2019, marcó el inicio de un nuevo capítulo en su vida al ser dada de alta este lunes. Tras un desafortunado accidente que la dejó hospitalizada por más de tres meses, Baptista, a sus 29 años, enfrentó un camino lleno de desafíos, incluyendo múltiples fracturas y complicaciones severas que la llevaron a pasar dos meses en coma con ayuda de respiración artificial.
El incidente ocurrió el pasado 23 de diciembre, cuando mientras entrenaba en bicicleta en una zona rural de São Paulo, fue atropellada por una motocicleta. El motociclista, implicado en el accidente y que resultó con heridas menores, enfrenta cargos legales por lesión corporal y conducía sin licencia al momento del suceso, según reportes.
El hospital São Luiz Itaim, donde Baptista ha estado recuperándose, confirmó su excelente condición clínica al momento del alta. Este suceso no solo marca el final de una etapa crítica para la triatleta sino también el inicio de su camino hacia la rehabilitación y, eventualmente, su retorno al deporte competitivo.
Representante de Brasil en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, donde ocupó la posición 32, Baptista no ha perdido de vista sus ambiciones deportivas. A pesar de no obtener medallas en las recientes justas continentales de Santiago 2023, su mirada está puesta en los Juegos Panamericanos de 2027 en Lima, con el objetivo de repetir su triunfo dorado.
“¡Tenemos todo el tiempo del mundo!”, expresó con optimismo Baptista a través de sus redes sociales, evidenciando su espíritu inquebrantable y su determinación para superar las adversidades. Su historia, marcada por la resiliencia y el coraje, está lejos de concluir. Con la rehabilitación en el horizonte, Luísa Baptista se prepara para escribir nuevos capítulos de éxito en su carrera deportiva, inspirando a muchos con su incansable búsqueda de superación y nuevos logros.