El equipo nacional de fútbol femenino de EE.UU. ha frustrado a Brasil en dos finales olímpicas consecutivas, ambas decididas en tiempo extra, con Marta en el campo en ambas ocasiones. Sin embargo, la selección brasileña y su emblemática número 10 esperan que la tercera sea la vencida y que los Juegos Olímpicos de París 2024 les otorguen finalmente el oro.

El equipo brasileño llegó a la capital francesa sin ser considerado favorito, pero con la promesa de una nueva era bajo la dirección de Arthur Elias, el exitoso exentrenador del Corinthians femenino. Elias se comprometió a restaurar el estilo alegre y libre que caracterizaba al fútbol de la Canarinha.

Elias asumió el desafío de devolver a la ‘Seleçao’ a la cima del fútbol mundial, después del fracaso del anterior entrenador, Pia Sundhage, en el Mundial de 2023 celebrado en Australia y Nueva Zelanda. Bajo el mando de Sundhage, Brasil fue eliminado en la fase de grupos, extendiendo a 16 años su ausencia en las finales mundialistas.

“Siempre dije públicamente que íbamos a competir con todos para situar a Brasil en el lugar que merece. Pero al grupo, siempre le dije que íbamos a ser campeones olímpicos o mundiales,” afirmó Elias tras asegurar el pase a la final contra la campeona del mundo, España, con una victoria de 4-2 el martes en Marsella.

Ahora, Brasil se prepara para su tercera final olímpica el viernes en París, enfrentándose al mismo rival que les arrebató el oro en Atenas 2004 y Pekín 2008: Estados Unidos, que ha ganado dos de sus cuatro títulos olímpicos enfrentándose a las brasileñas.