El título conquistado en los Juegos Olímpicos de París tiene “un sabor especial”, declaró la argelina Imane Khelif tras ganar el oro en boxeo el viernes, después de dos semanas de especulaciones sobre su elegibilidad en medio de una disputa de género que ha envuelto a la cita olímpica.

Khelif, quien se impuso a la china Yang Liu en la final de peso wélter, y la taiwanesa Lin Yu-ting, se vieron envueltas en una tormenta mediática debido a su descalificación por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA) de los Campeonatos del Mundo de 2023. La IBA alegó que una prueba de cromosomas sexuales las había declarado no elegibles.

Ambas pudieron competir en los Juegos de París después de que el Comité Olímpico Internacional (COI) despojara a la IBA de su condición de organismo rector de este deporte en 2023 y asumiera el control de la organización del boxeo para estos Juegos. El COI está utilizando las normas de elegibilidad de boxeo que se aplicaron en las Olimpiadas de 2016 y 2021, que no incluyen pruebas de género.

“Soy una mujer como cualquier otra”, afirmó Khelif en rueda de prensa tras ganar la medalla de oro. “Nací mujer y he vivido como mujer, pero hay enemigos del éxito que no pueden digerir mi triunfo. Eso también le da a mi victoria un sabor especial”.

El COI rechazó los resultados de las pruebas ordenadas por la IBA a Khelif y Lin, considerándolos arbitrarios e ilegítimos, y alegando que no había motivo para realizarlas.

Khelif, medalla de plata en los Mundiales de 2022, expresó su incomprensión ante la actuación de la IBA. “Todo lo que se dice de mí en las redes sociales es inmoral. Quiero cambiar la opinión de la gente en todo el mundo”, añadió Khelif. “Desde 2018, competí bajo la autoridad de la IBA y lo saben todo sobre mí. No reconozco a esta IBA. Algunos de sus miembros me odian y no sé por qué (…) Hoy les he mandado el mensaje de que mi honor está por encima de todo”.

Khelif es la primera mujer argelina en ganar una medalla de oro olímpica en boxeo, y el primer púgil en repetir la hazaña de Hocine Soltani en los Juegos de Atlanta 1996.

La joven de 25 años ha recibido un inmenso apoyo del público en sus combates, con aficionados argelinos, muchos de ellos mujeres, acudiendo en masa a Roland Garros y a la North Paris Arena para animarla. “La mujer argelina es conocida por su valentía”, declaró Khelif. “La presencia de estas mujeres en el estadio envió al mundo el mensaje de que nuestro honor está por encima de todo”.