El exfutbolista brasileño Robinho continuará cumpliendo su condena de nueve años de prisión por violación grupal en una cárcel de Sao Paulo, luego de que el Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil desestimara las solicitudes presentadas por su defensa para obtener su libertad.

En una votación virtual realizada el martes, los jueces del STF decidieron, por mayoría de 9-2, mantener al exjugador del Real Madrid y del AC Milan en prisión. Según el juez Luiz Fux, los argumentos de la defensa, que alegaban irregularidades procesales y cuestionaban la constitucionalidad de la ley de migración entre Italia y Brasil, “no revelan ilegalidad ni abuso de poder”.

Robinho, de 40 años, fue condenado en Italia en 2017 por participar en la violación en grupo de una joven albanesa de 23 años en una discoteca de Milán. Aunque la sentencia fue ratificada en 2022, no pudo ser extraditado debido a la prohibición constitucional de Brasil de entregar a sus ciudadanos.

El exfutbolista se entregó en marzo de este año tras la homologación de la condena por parte del Superior Tribunal de Justicia (STJ). La defensa había presentado dos habeas corpus, argumentando que la pena no debía ejecutarse hasta agotar todos los recursos legales y cuestionando la competencia del STJ en el caso.

Italia activó el acuerdo bilateral de migración para validar la sentencia, lo que permitió que Robinho fuera arrestado en territorio brasileño. Sin embargo, el STF respaldó la actuación de la justicia brasileña y negó cualquier violación de normas constitucionales o internacionales.

Robinho sigue defendiendo su inocencia, alegando que la relación con la víctima fue consensuada, mientras su caso sigue siendo objeto de amplio escrutinio en Brasil e Italia.