diciembre 10, 2024
A dos días de que la FIFA confirme oficialmente a Arabia Saudí como sede de la Copa Mundial de 2034, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, se comprometió este lunes a promover el respeto de las normas laborales de los trabajadores migrantes en los preparativos del torneo.
Arabia Saudí, único candidato para albergar el evento, obtendría la sede sin oposición tras la reunión en línea de la FIFA programada para este miércoles. El proyecto incluye la construcción de ocho de los 15 estadios propuestos y la creación de 175,000 habitaciones de hotel, tareas que recaerán en su mayoría sobre trabajadores migrantes, principalmente del sur de Asia, un sector sujeto a un marco laboral que organizaciones de derechos humanos han calificado como insuficiente en términos de protección.
Türk destacó, en una rueda de prensa previa al Día de los Derechos Humanos, que aunque la FIFA no ha solicitado directamente la participación de su organización, están comprometidos en garantizar que los derechos humanos sean un eje central en la organización de eventos deportivos globales.
“Nuestro objetivo es asegurar que los derechos humanos no solo se consideren al planificar grandes acontecimientos deportivos, sino también al ejecutarlos”, afirmó el comisionado.