Redacción NVs / Agencias

El presidente del Nápoles, Aurelio de Laurentiis, enfrenta la posibilidad de un juicio por presunta falsa contabilidad, tras el cierre de las investigaciones este viernes por parte de la Fiscalía de Roma en relación al fichaje del nigeriano Victor Osimhen por el club italiano desde el Lille francés en 2020.

Los fiscales han incluido al empresario y a la sociedad deportiva en la lista de sospechosos por un delito de falsa contabilidad en la transferencia de Osimhen en septiembre pasado. La operación de compra del jugador supuso un desembolso de más de 71 millones de euros para el Nápoles, marcando un hito como la mayor inversión en la historia del club. Este monto se acordó pagar en un período de 5 años, pero hasta ahora solo se han abonado 50 millones de euros. Además, se incluyó en el acuerdo el traspaso de 4 jugadores jóvenes valuados en más de 21 millones de euros.

Siguiendo una línea similar al caso del Juventus Turín, las investigaciones sugieren posibles “plusvalías ficticias” con el propósito de inflar el precio de mercado de los 4 jugadores, cuyo valor real no correspondía a lo establecido. Esta táctica se habría utilizado para reducir costos en los ejercicios económicos y evadir impuestos. Es relevante señalar que estos jóvenes futbolistas nunca llegaron a jugar en el Lille y terminaron en equipos de tercera división italiana u otros de nivel similar.