Naoki Shimizu, un visionario japonés originario de Nishinomiya, ha transformado su carrera de docente en una apasionante travesía como ‘corredor GPS’. Este innovador proyecto, que comenzó en 2016, lo ha llevado a recorrer nueve países, incluidos Francia, Alemania, Austria, Grecia, Italia, Albania, Taiwán, Portugal y España. En abril, Shimizu se propone su desafío más ambicioso hasta la fecha: crear un geoglifo digital de una alpaca a lo largo de 3.000 kilómetros en Perú, su primera aventura en Sudamérica y un tributo a las milenarias líneas de Nazca.

Shimizu, que comparte sus singulares creaciones a través de su sitio web y redes sociales, financia sus viajes mediante participación en eventos deportivos, patrocinios y colaboraciones, además de impartir charlas gracias a su experiencia como educador. La inspiración para su cambio de carrera surgió mientras enseñaba a un estudiante en silla de ruedas, lo que le motivó a concebir un deporte inclusivo que pudiera practicarse con tecnología.

Hasta ahora, Shimizu ha completado 1.350 dibujos, cubriendo unos 12.700 kilómetros, con diseños que van desde textos y siluetas de figuras históricas hasta personajes de la cultura pop. El proyecto en Perú, que comenzará el 1 de abril y se estima durará entre tres y cuatro meses, será su mayor reto, con la intención de dibujar una alpaca, simbolizando un puente cultural entre Japón y Perú.

Shimizu invita a todos los interesados a unirse a su recorrido en Perú, compartiendo su ubicación en Instagram para facilitar la participación. Con este proyecto, busca fomentar una cultura de carrera no competitiva, promoviendo un nuevo tipo de deporte que, según él, podría mejorar la calidad de vida en una sociedad cada vez más envejecida y alentar a otros a explorar sus propias creaciones.