En la víspera del esperado regreso de Vinícius Junior al campo del Valencia, Carlo Ancelotti, entrenador del Real Madrid, hizo un llamado a la afición de Mestalla para que se entreguen al disfrute del fútbol, dejando atrás los incidentes racistas de la temporada anterior. Ancelotti subrayó la importancia de identificar y condenar cualquier acto racista, calificándolo como un delito. También hizo referencia a la reciente tragedia en Valencia, expresando su solidaridad con las víctimas del incendio en un edificio residencial y reiterando su apoyo a la comunidad afectada.

El técnico italiano destacó el deseo mutuo de Real Madrid y Valencia por brindar un espectáculo digno a sus seguidores, enfatizando la necesidad de recordar y condenar los incidentes racistas hacia Vinícius en encuentros pasados. Reconoció el esfuerzo del Valencia por identificar a los responsables, señalando los avances en la lucha contra el racismo en el deporte y en la sociedad española.

Ancelotti descartó dar descanso a Vinícius para el partido, afirmando que el jugador está preparado para brindar su mejor actuación. Su enfoque está en la estrategia para enfrentar a un Valencia organizado y talentoso, sin preparativos especiales a pesar de los antecedentes con Vinícius. Finalmente, alentó a la afición del Valencia a disfrutar del partido y de la “fiesta del fútbol”, pese a su conflicto de intereses deseando una victoria para el Real Madrid.