julio 24, 2024
La selección argentina dirigida por Javier Mascherano tuvo un debut amargo en los Juegos de París al caer 2-1 frente a Marruecos, liderado por Achraf Hakimi, este miércoles en el estadio Geoffroy-Guichard en Saint-Étienne. El partido terminó con un insólito final.
Ambos equipos regresaron al campo, ya sin público en las gradas, para disputar tres minutos de tiempo añadido dos horas después de que el juego hubiera sido dado por terminado tanto por el sitio oficial de las justas como por las cuentas en la red social X de ambos combinados.
El encuentro se había dado por finalizado justo después de que el volante argentino Cristian Medina anotara el tanto de la paridad 2-2 en una reposición de 16 minutos. Sin embargo, su gol fue invalidado por fuera de juego tras una revisión del VAR, realizada cuando el partido ya había sido concluido.
El gol de Medina había reanimado los ánimos en el estadio Geoffroy-Guichard, caldeados desde el inicio con pitos a los jugadores argentinos en medio de la tensión entre Francia y Argentina, tras la celebración albiceleste de la reciente Copa América con una canción considerada ‘racista’ hacia los jugadores franceses.
Durante la celebración del gol anulado, los jugadores argentinos recibieron botellas y vasos lanzados desde las gradas, lo que obligó al árbitro sueco Glenn Nyberg a llevar a los jugadores a los vestuarios. Ambas escuadras regresaron a los camerinos sin que se hubiera pitado oficialmente el final del encuentro, informó la AFP.