Estados Unidos inició la búsqueda de su quinto oro olímpico consecutivo en baloncesto masculino con un contundente triunfo de 110-84 sobre Serbia, liderada por Nikola Jokic, este domingo en Lille. El equipo estadounidense fue comandado por su experimentada guardia, con un inspirado Kevin Durant y el liderazgo indiscutible de LeBron James.
Durant, con tres oros olímpicos en su haber, comenzó su camino hacia un cuarto con una actuación estelar: 21 puntos sin fallo, incluyendo cinco triples en solo 8 minutos y 39 segundos de juego, destacando una canasta espectacular sobre la bocina en la que terminó en el suelo.
LeBron James, a sus 39 años, se convirtió en el jugador más veterano en representar al Team USA, contribuyendo con 21 puntos y un liderazgo total en la cancha.
Apodados los Vengadores desde su formación en septiembre en Manila, tras la decepción de no obtener medalla en el Mundial de 2023, el equipo comenzó su misión conteniendo al ‘Joker’ del baloncesto, Nikola Jokic. A Jokic, tres veces MVP de la NBA, le costó adaptarse al partido, con tres pérdidas de balón en el primer cuarto.
Sin embargo, Serbia logró un primer impulso (10-2) que el técnico estadounidense, Steve Kerr, supo frenar con un tiempo muerto. Tras el ajuste, los tiradores estadounidenses comenzaron a acertar, con triples de Stephen Curry, Devin Booker, Anthony Edwards y Durant, quien fue clave para enderezar el partido desde el banquillo. Con Durant en su mejor nivel, el Team USA logró una ventaja de diez puntos (35-25).
En el segundo cuarto, Jokic reavivó a su equipo con nueve puntos consecutivos, terminando el partido con 20 puntos. Joel Embiid, quien prometió jugar para Francia pero finalmente representa a Estados Unidos, fue abucheado cada vez que tocaba el balón, y no encontró su mejor juego en la cancha. Sin embargo, el Team USA, en plena forma, amplió la ventaja en la segunda mitad.
Steve Kerr no necesitó utilizar a Tyrese Haliburton ni a Jayson Tatum, quienes observaron el juego desde el banquillo. Con James, Durant y Curry, debutando en los Juegos Olímpicos a los 36 años, el Team USA demostró una vez más su dominio en el baloncesto mundial.
