El pívot de los Boston Celtics Neemías Queta, el primer portugués en llegar a la NBA, declaró que se ve ganando más campeonatos y siendo “un jugador muy importante para el equipo”, tras sumar su 18º anillo con su equipo en junio de esta temporada.
Así lo señaló este martes a EFE durante el Neemías Queta Training Camp, un campamento de baloncesto para niños que se lleva a cabo en el pabellón de la Quinta dos Lombos, en Carcavelos, en las afueras de Lisboa. El campamento comenzó hoy y terminará el viernes.
Queta comentó que, de cara a la próxima temporada, su principal objetivo es mantenerse al mismo nivel, ya que, después de haber ganado el torneo, es consciente de que todos estarán mirando a los Celtics porque “es el equipo a batir”.
Originario de Barreiro, en el extrarradio lisboeta, Neemías Esdras Barbosa Queta, de 25 años y 2.13 metros de altura, estudió en la Universidad Estatal de Utah (EE.UU.), donde destacó por sus habilidades como jugador. En 2021, fue seleccionado por los Sacramento Kings, convirtiéndose en el primer baloncestista luso en entrar en la NBA, y en 2023 llegó a los Boston Celtics.
Para Queta, jugar en la NBA ha sido una experiencia “muy buena”. “Siempre digo que desde niño fue un sueño”, afirmó, agradeciendo el apoyo recibido desde Portugal. Su adaptación a la vida en EE.UU. y al torneo más importante del mundo fue “relativamente fácil”.
“Tuve buenas ayudas y buenas personas desde el inicio cuando fui a la universidad que me enseñaron prácticamente el camino y lo que era necesario. Solo quería jugar al ‘basket’, aunque tenía que estudiar”, dijo el jugador de origen guineano, quien aseguró que nunca cambió sus rutinas.
En los Boston Celtics, Queta tiene como aliado al estadounidense Payton Pritchard, con quien mantiene “una amistad fuerte” dentro y fuera de la cancha. Sobre la posibilidad de volver a Europa y a Portugal, indicó que no ha pensado mucho en ello, ya que ve que tiene “muchos años de carrera por delante”.
Durante los cuatro días del campamento que lleva su nombre, Queta desea transmitir a los niños aspectos técnicos y cosas concretas que ellos puedan mejorar. “Quiero evolucionar porque nunca se sabe si puedo ser entrenador o algo así en el futuro”, dijo. “Comenzar con jugadores jóvenes siempre es gratificante, tienen más hambre, así que quiero aprender un poco de ellos, al tiempo que ellos aprenden conmigo”.
Un total de 40 menores, entre ellos ocho niñas, de entre 13 y 17 años, participan en la primera edición de este campamento, organizado por Hoopers Club y cuyo director técnico es Carlos Barroca, ex vicepresidente de Operaciones de la NBA Asia. Barroca explicó a EFE que para Portugal “es muy importante” tener un jugador en la NBA, y lo que Queta está haciendo con esta iniciativa es devolver al país la fama que ha recibido e “incentivar” a los jóvenes para que tengan sueños.
El lema del campamento es “aprender y disfrutar”, ya que, más allá de adquirir nuevos conocimientos, también deben pasarlo bien, crear nuevas relaciones y amigos.
