Max Verstappen no puede entender cómo ha pasado de manejar el monoplaza más dominante de la Fórmula 1 la temporada pasada a enfrentarse a lo que él describe como un “monstruo” en la actualidad.

El piloto de Red Bull tuvo un fin de semana decepcionante en el Gran Premio de Italia, donde logró calificar séptimo y terminó la carrera del domingo en el sexto lugar.

“El año pasado teníamos un coche increíble, el más dominante de la historia, y ahora lo hemos convertido en un monstruo”, confesó Verstappen con desánimo. “Tenemos que revertir esta situación”.

En el Gran Premio de Monza del año pasado, Verstappen estableció un récord al lograr su décima victoria consecutiva en una temporada en la que su dominio nunca estuvo en duda.

Actualmente, el tricampeón de la F1 atraviesa su racha más larga sin victorias desde 2020, con seis carreras consecutivas sin triunfos. Su ventaja en el campeonato de pilotos se ha reducido carrera tras carrera, con Lando Norris acercándose.

El único alivio del domingo fue que Norris terminó tercero, detrás de Oscar Piastri — su compañero en McLaren — y Charles Leclerc, quien deleitó a la afición local con una victoria en el hogar de Ferrari tras una audaz estrategia de una sola parada en boxes.

Como resultado, Norris ha reducido la diferencia con Verstappen a 62 puntos, mientras que McLaren se ha situado a ocho puntos de Red Bull en la clasificación de constructores.

“En este momento, ambos campeonatos parecen inalcanzables”, admitió Verstappen.

El piloto neerlandés mencionó que lleva semanas advirtiendo a su equipo sobre el rendimiento del monoplaza, pero “lamentablemente, no tengo un título en ingeniería o aerodinámica”.

“Ahora depende del equipo hacer ajustes significativos al coche, porque hemos pasado de tener un coche dominante a uno prácticamente incontrolable en solo seis a ocho meses”, agregó.

“A eso es a lo que nos enfrentamos, y necesitamos cambiar el coche por completo”, concluyó.

Aún quedan ocho carreras en el calendario, incluidas Austin (Texas), Ciudad de México y Abu Dabi, circuitos en los que Verstappen ha ganado en los últimos tres años.

“No importa. En el estado actual, estamos fallando en todos los frentes, así que necesitamos realizar muchos cambios”, enfatizó Verstappen.

Por su parte, Norris podría estar aún más cerca de Verstappen si McLaren hubiera intervenido en las últimas vueltas para cambiar las posiciones entre él y Piastri, ya que Piastri estaba lejos de alcanzar a Leclerc.

“No estoy aquí para pedir que me dejen pasar. Compito para ganar, no para eso”, dijo Norris. “Piastri lo hizo mejor que yo y por eso terminó tercero. Creo que merecía ese puesto”.

Al ser preguntado, Norris admitió que preferiría que el equipo priorizara la lucha por el título.

“Eso es lo que deseo, pero es algo que no puedo decidir por completo. Es complicado, y aunque no diré que el tiempo se está agotando, sí está pasando lentamente. Aún creo que podemos hacerlo. El ritmo fue bueno y creo que estuvimos cerca de tener el mejor coche hoy”, concluyó.