diciembre 1, 2024
El París Saint Germain sigue atravesando una crisis de efectividad, y ni siquiera su dominio en la Ligue 1 parece ser un consuelo ante los últimos resultados. Este sábado, el equipo de Luis Enrique Martínez empató 1-1 en casa contra el Nantes, antepenúltimo de la clasificación, lo que dispara las alarmas sobre el rendimiento del gigante francés, que sigue liderando la liga pero con dudas evidentes sobre su juego.
El PSG sigue teniendo un problema capital: no domina las áreas. En ataque, aunque muestra ciertas explosiones de velocidad, como las de Bradley Barcola y Nuno Mendes, carece de la efectividad necesaria para resolver los partidos. A pesar de arrancar con un gol tempranero (1-0) de Achraf Hakimi tras una rápida jugada de Nuno Mendes y Gonçalo Ramos, el PSG no logró capitalizar su dominio en el primer tiempo.
A lo largo de la primera mitad, los parisinos tuvieron varias oportunidades para ampliar la ventaja, pero se encontraron con la figura de Carlgren, el portero del Nantes, que fue crucial al evitar goles de Vitinha, Hakimi y Nuno Mendes. Incluso, el PSG dio un poste y falló varias oportunidades claras, con Vitinha y João Neves desaprovechando opciones claras de gol.
A pesar de la superioridad manifiesta, el Nantes logró empatar en el minuto 38, con un gol de Abline ante Donnarumma, lo que dejó al PSG con una sensación de vulnerabilidad que se extiende a su defensa. Aunque no le generan demasiadas ocasiones, cuando lo hacen, los rivales logran inquietar la portería parisina, algo inusual para un equipo de la talla del PSG.
El empate contra el Nantes no solo resalta la falta de efectividad ofensiva, sino también las dudas sobre su solidez defensiva, especialmente cuando se enfrenta a equipos que saben superar su presión.