La marca personal de Cristiano Ronaldo, ‘CR7’, ha alcanzado en 2025 un valor histórico de $882 millones, lo que representa un incremento del 325 % respecto a 2020, según un estudio del Instituto Portugués de Administración y Marketing (IPAM).
A sus 40 años, el astro portugués se consolida como un fenómeno que va más allá del fútbol, desempeñándose como atleta, patrocinado, influencer e inversor. El estudio, basado en el índice ‘Sports Reputation’ de IPAM, analizó 28 variables en seis dimensiones clave: ingresos, medios de comunicación, redes sociales, palmarés, influencia social e impacto.
Desde 2011, cuando su marca estaba valorada en $25.9 millones, la combinación de su éxito deportivo y su presencia mediática ha impulsado su crecimiento exponencial. Actualmente, Ronaldo percibe más de $200 millones anuales en el Al-Nassr y $155 millones en contratos publicitarios con marcas como Nike, Tag Heuer y Louis Vuitton.
En redes sociales, el portugués es la persona más seguida del mundo, superando los 1.000 millones de seguidores en todas sus plataformas, con Instagram como su principal canal, donde acumula 648 millones de fans. Su impacto global es igualmente impresionante: cada año genera 22.3 millones de noticias en medios, registra 187 millones de búsquedas en Google y es mencionado en 63,000 artículos científicos.
En el ámbito deportivo, Ronaldo ha conquistado 31 grandes trofeos, incluidas cinco Ligas de Campeones y cinco Balones de Oro. Además, en los últimos años ha ampliado su faceta como empresario con inversiones en hostelería, moda y salud.
Daniel Sá, director ejecutivo de IPAM y autor del estudio, destaca que Cristiano Ronaldo es “mucho más que un futbolista”, ya que se ha convertido en una marca global sin precedentes, sinónimo de “excelencia, innovación e impacto”.
El informe subraya que el crecimiento de la marca CR7 se debe a un aumento del 308 % en su salario, un 435 % en ingresos por patrocinios y un 280 % en seguidores en redes sociales desde 2020. Se prevé que su valor continúe en ascenso, impulsado por su renovación con el Al-Nassr, su posible participación en el Mundial 2026 y su expansión en el mundo de los negocios.
