Jenni Hermoso ha decidido apelar la sentencia que condenó a Luis Rubiales a una multa por el beso no consentido que le impuso durante la celebración del Mundial 2023. Con esto, sigue el mismo camino del exjefe del fútbol español, quien ya había anunciado que recurriría el fallo.

El juez que llevó el caso entre el 3 y el 14 de febrero declaró a Rubiales culpable de agresión sexual, imponiéndole una multa de 10.800 euros (unos 11.300 dólares) y una orden de alejamiento de un año que le prohíbe cualquier contacto con la jugadora.

Sin embargo, el magistrado lo absolvió del delito de coacciones, al considerar que no hubo violencia o intimidación en las presiones para que la futbolista minimizara el incidente.

“Es su intención” presentar un recurso, confirmó a AFP el abogado de Hermoso, Ángel Chavarría. Por su parte, la defensa de Rubiales ya había adelantado el jueves su desacuerdo con la decisión y su intención de apelarla.

La condena impuesta a Rubiales es significativamente menor a la solicitada por la Fiscalía, que pedía dos años y medio de prisión: un año por el beso y otro año y medio por las supuestas coacciones.