Tras años de cambios en el banquillo con entrenadores como Mike Brown, Mike D’Antoni, Byron Scott, Luke Walton, Frank Vogel y Darvin Ham, el equipo finalmente ha encontrado estabilidad con JJ Redick.
El viernes por la noche, los Lakers lograron una victoria de 106-102 sobre los Clippers en el Imaginary-Money-dot-com Arena, mejorando su récord a 37-21. Pero este éxito no se trata solo de números.
Actualmente cuartos en la Conferencia Oeste, los Lakers tienen opciones de escalar hasta el segundo puesto antes del cierre de la temporada regular. Sin embargo, lo más importante no es su posición en la tabla, sino cómo están jugando. Redick ha cambiado la cultura del equipo y los jugadores han comprado su filosofía.
La clave de esta transformación es la defensa. A pesar de haber traspasado a sus dos mejores defensores en el intercambio por Luka Doncic, los Lakers han logrado contener a sus últimos seis rivales a 102 puntos o menos, convirtiéndose en la mejor defensa de la NBA en este tramo.
“Así somos nosotros”, afirmó LeBron James. “Quiero decir, es lo que somos en este momento”.
La influencia de Redick en los Lakers ha sido comparada con la revolución que Sean McVay implementó en los Rams y el impacto que Jim Harbaugh ha tenido en los Chargers. Su liderazgo ha convertido a los Lakers en un reflejo de su carácter competitivo y su enfoque táctico.
Con Redick al mando, Los Ángeles vuelve a soñar con el campeonato.Los Lakers han encontrado a su líder.
