Agencias

Segundo clasificado de las eliminatorias de Concacaf a Catar-2022, Estados Unidos arrancará el jueves el año mundialista recibiendo en la gélida Columbus (Ohio) a El Salvador, obligado a reaccionar para seguir soñando con la clasificación.

Estados Unidos, con 15 puntos a falta de seis jornadas, confía en lograr un triunfo ante el penúltimo clasificado del octagonal antes de visitar el domingo al líder Canadá (16 puntos).

Decidido a asegurar su boleto mundialista en esta ventana de tres partidos, Estados Unidos optó por recibir el jueves a El Salvador y el 2 de febrero a Honduras en las frías Columbus y Saint Paul (Minnesota), donde se espera que los partidos se disputen con temperaturas bajo cero.

“Así como vamos a América Central y jugamos en la humedad y el calor, a veces el esmog y la altitud, esta es una oportunidad para que obtengamos una ventaja sobre nuestros rivales”, reconoció el seleccionador Gregg Berhalter esta semana tras un entrenamiento bajo la nieve.

“Todos vienen del ecuador y va a ser muy difícil para ellos enfrentarse a estas condiciones”, auguró. “Y nuestros chicos, que han estado jugando en Europa en temperaturas más frías, estarán listos”.

Berhalter recupera a sus jóvenes figuras Sergiño Dest (FC Barcelona), baja por lesión en los dos juegos de noviembre, y Weston McKennie (Juventus), ausente en el último de esos choques por acumulación de tarjetas.

En ataque tendrá a su disposición a Christian Pulisic (Chelsea), el líder del equipo; a Brenden Aaronson (Salzburgo), codiciado por la Premier League, y al mexicano-estadounidense Ricardo Pepi (Augsburg).